martes, 12 de agosto de 2014

Excavaciones en Atapuerca: por un europeo más antiguo

Entre el primero y el 25 de julio, un equipo de 30 personas excavó en el nivel 10 del yacimiento Gran Dolina, en una superficie de 90 metros cuadrados, de unos 420 mil años de antigüedad. 

En el conocido complejo pleistocénico, ubicado en Burgos, España, se prevén probables cronologías cercanas a los dos millones de años en niveles arqueológicos no explorados de sus yacimientos más prolíficos. La excavación de un posible hogar neandertal invita a pensar en que pueden obtenerse muchas claves sobre el modo de vida de estos homínidos


Por Flor de Paz

La campaña Ata 2014 acaba de concluir. El trabajo de 150 arqueólogos hizo posible, una vez más, la extracción de un nuevo “surtido” de fósiles que se suman a la enorme colección generada en más de 35 años de excavaciones en la Sierra de Atapuerca. Pero este solo es el primer paso de un largo proceso; los materiales sacados en cada jornada estival, base empírica de la producción de conocimientos, constituyen referentes ineludibles de las investigaciones sobre evolución humana en España y el mundo.
Enfocados a esa universalidad del Proyecto y a un cambio de estrategia de las excavaciones en los próximos años, sus codirectores, Eudald Carbonell, José María Bermúdez de Castro y Juan Luis Arsuaga, anunciaron en la acostumbrada nota de fin de campaña (dirigida a la prensa y a otros actores sociales) que la jornada recién concluida se caracterizó por la realización de exploraciones geológicas y geocronológicas en diferentes yacimientos del complejo arqueo-paleontológico.
Entre esos sondeos estuvieron los realizados en Gran Dolina, en la Trinchera del Ferrocarril. De los sedimentos de sus niveles más bajos y estériles fueron tomadas numerosas muestras para datar y conocer sus propiedades magnéticas. Así fue planificada la estrategia de excavación de la cueva del yacimiento de cara a profundizar lo antes posible en el nivel donde fue descubierto Homo antecesor, una especie de homínido descrita por primera vez en Atapuerca hace 20 años.

Esta ha sido una campaña de transición. Algunos de los trabajos realizados estuvieron encaminados a la preparación de una nueva estrategia para las excavaciones que se realizarán hasta la jubilación de los actuales codirectores (en la foto junto con Alicia García, consejera de cultura de la Junta de Castilla y León). Foto: EFE. 

Según el suplemento ATA, de El Correo de Burgos, el trabajo geológico y geocronológico realizado en la parte baja de Gran Dolina, “ha dado con niveles que están por debajo del subcrón Olduvai de 1,7 millones de años”, lo cual pudiera ser indicio de la existencia de depósitos con restos fósiles de esa edad. Esta hipótesis, hasta ahora considerada como poco probable por el EIA y los codirectores, ha sido reevaluada al constatarse la existencia de registros más antiguos. Hemos empezado a pensar —estimó Carbonell— que en la Trinchera del Ferrocarril podemos tener cronologías africanas.

Yacimiento de la Sima del Elefante. En el nivel TE9 de este sitio fue hallada una mandíbula humana de 1,3 millones de años en el 2007. Los hallazgos de la campaña de 2014 refuerzan los resultantes ya existentes acerca de la presencia de grupos humanos en este sitio en el Pleistoceno Inferior. Foto: López Araico.

La localización de huellas neandertales en la Sierra, uno de los propósitos del proyecto científico,  fue reforzada durante esta campaña por los resultados obtenidos en el asentamiento al aire libre Fuente Mudarra, que se excava por tercer año consecutivo. Según la nota de prensa del EIA, “el hallazgo de un posible hogar, con herramientas in-situ, y de un pequeño fragmento de hueso, invitan a pensar que este lugar puede darnos muchas claves sobre el modo de vida de los Neandertales hace unos 50 mil años. También acentúa la idea de que los yacimientos de los alrededores de Atapuerca pueden tener un enorme potencial, con multitud de campamentos de la época”.

Excavaciones en el yacimiento Fuente Mudarra, en los alrededores de la Sierra de Atapuerca. Se trata de una ocupación en una ladera a orillas del río Pico donde diferentes grupos de neandertales estuvieron a lo largo de decenas de miles de años. Foto: Marta Navazo (EIA).

Sima de los Huesos, yacimiento en el que desde 1984 Arsuaga y su equipo han recuperado cerca de siete mil fósiles correspondientes a 28 individuos de una especie pre-neandertal, siguió deparando muchas satisfacciones en esta campaña con nuevos hallazgos de fósiles humanos. “Podemos estar asistiendo al origen de los neandertales, pues tenemos allí algunos de los miembros más antiguos de este linaje, tanto por su apariencia como por su edad: unos 430 mil años, según la última datación”, dijo el codirector a La voz Digital, de Cádiz.

Excavación en la Sima de los Huesos. Foto: Javier Trueba

Al relacionar este último asentamiento con el de Dolina, el documento citado explica que la excavación del nivel TD10.3, contemporáneo con los fósiles humanos pre-neandertales de la Sima de los Huesos, nos hablará en futuras jornadas arqueológicas del modo de vida de los homínidos hallados en este sitio. Asimismo hace constar que dicha unidad arqueológica “contiene una gran colada de bloques calizos, entre los que ha ido recuperándose un registro diversificado, con relativamente pocos instrumentos líticos y con un nuevo taxón predominante: el caballo.

De derecha a izquierda la doctora Marina Mosquera, cuando encontró una lasca de sílex del cretácico en el nivel 10.3 de Gran Dolina, donde se trabajó durante la recién concluida campaña de excavaciones. (Foto: Gizéh Rangel).
Un detallado análisis del complejo arqueo-paleontológico burgalés, publicado por Carbonell en su blog Sapiens ( http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/sapiens/),  da cuenta del conocimiento obtenido acerca del nivel 10 de Dolina (de entre 250 mil y 450 mil años de antigüedad). El lugar alberga huellas de ocupaciones recurrentes  relacionadas con la caza o con el establecimiento temporal para actividades específicas, estacionales o continuas,  como consecuencia de un aumento demográfico que provocó grandes flujos migratorios en la zona y, probablemente, en toda la península ibérica y Eurasia durante el pleistoceno medio.
Sobre las excavaciones en el nivel 4 de este yacimiento (por debajo de Homo antecesor), la nota de prensa del EIA explica que conllevaron al hallazgo de una de las piezas más espectaculares recuperadas durante la campaña: “una mano y un pie de un jaguar (Panthera gombaszoegensis) en conexión anatómica. El animal murió en la cueva alimentándose, quizás, de alguno de los cadáveres caídos.
“También fueron descubiertas algunas herramientas de sílex que seguramente sirvieron para procesar las carcasas de los animales muertos. Lo más importante en este sentido es que fue confirmada la continuidad de presencia humana en la Sierra de Atapuerca entre un millón de años (TD4) y los 800.000 de Homo antecessor (TD6)”.
En el yacimiento de Galería, con frecuencia llamado “el supermercado”, los hallazgos de este año “están en consonancia con las hipótesis que han identificado al sitio desde las primeras excavaciones de las décadas de los 80 y 90: los homínidos entraban a la cueva de manera esporádica para aprovechar a los animales que caían a través a de una trampa natural situada al Este de la cavidad.
“Más de 500 de fauna y más de 40 restos líticos fueron recuperados en la unidad excavada, con una datación de 260 mil años. Entre los faunísticos se hallan costillas, vértebras y elementos craneales pertenecientes a ciervos y caballos principalmente. Las herramientas líticas son lascas de roca sílex neógeno, utilizadas para descarnar a los animales, y bases naturales de cuarcita, usadas como percutores para romper huesos y retocar las herramientas. La actividad de carnívoros fue identificada a través de mordeduras en los restos abandonados por los humanos”.
En torno a la Cueva Mayor, donde también se halla ubicada la Sima de los Huesos, “fueron realizadas excavaciones en el yacimiento Galería de las Estatuas. La intervención en sedimentos del Pleistoceno Superior permitió extraer este año restos de fauna y piezas de industria musteriense, propia de los neandertales”.
Un contexto funerario con inhumaciones humanas acompañadas de elementos de ajuar pudo ser documentado en niveles calcolíticos de Portalón, otro de los sitios del complejo Cueva Mayor, describe la nota del EIA. “El inicio de excavaciones en niveles neolíticos presagia una prometedora campaña 2015 para en este yacimiento”.
Por otra parte, la excavación de un sepulcro colectivo calcolítico de alrededor de 4600 años de antigüedad, en el que se viene interviniendo en los últimos años, constituyó el centro de atención en la cueva de El Mirador, otro de los nichos arqueológicos del Neolítico en la Sierra. “Hasta la fecha fueron documentados los restos de un mínimo de 23 individuos, depositados en una pequeña cámara natural, acompañados de un reducido número de objetos”.
Finalmente, toneladas de sedimentos procedentes de las excavaciones de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca fueron lavadas y triadas a la orilla del río Arlanzón. Dicha labor, encaminada a recuperar la microfauna (diminutos fósiles de mamíferos, anfibios, aves, reptiles y peces) que escapa  a los ojos de los arqueólogos,  permitió descubrir en esta campaña un cráneo casi completo de un hámster extinguido y de un desmán de hace cerca de 450 mil años.
Cada yacimiento explorado durante las 36 campañas desarrolladas por el Proyecto Atapuerca ha aportado nuevas fichas al rompecabezas de la vida prehistórica en ese ecosistema desde hace 1,3 millones de años hasta la etapa romana. Una jornada de excavaciones es solo la continuación de un trabajo continuo que durante todo el año tiene lugar en gabinetes, aulas, publicaciones científicas y en el Sistema Atapuerca. Cultura de la Evolución.

Como colofón de la campaña arqueológica en la Sierra de Atapuerca se produjo la llegada al Museo de la Evolución Humana de la reproducción de Homo antecesor, de la escultora francesa Elisabeth Daynés. La figura del llamado Chico de la Gran Dolina, homínido de unos diez años de edad, es una reproducción hiperrealista que la autora creó a partir del asesoramiento científico de Bermúdez de Castro. Foto: El Correo de Burgos.

 El Proyecto Atapuerca
Es el mayor y más estructurado que existe en España con subvención estatal. Está integrado por los tres codirectores y el Equipo de Investigación de Atapuerca (EIA), cuyos miembros (150 personas, la mayoría doctores y licenciados) forman parte de un sistema de instituciones científicas y docentes ubicadas en Burgos, Madrid y Tarragona, fundamentalmente.
En su impacto mediático y social se halla una de las bases de su desarrollo y consolidación. Desde el punto de vista científico, constituye una importante reserva de conocimientos documentados sobre el pleistoceno europeo y sus probables conexiones con sitios euroasiáticos y africanos.
En el ámbito académico y profesional, cuenta con una infraestructura inserta en universidades con proyectos de internacionalización. Su programa investigativo general está fundamentado en la reconstrucción de la evolución humana desde la actualidad hasta hace 1.5 millones de años en el entorno de la Sierra de Atapuerca. A partir de ahí, se despliegan proyectos de tipo antropológico, arqueológico, geológico y botánico, que permiten traspasar el análisis del registro arqueológico de las excavaciones que realiza el EIA cada verano en la llamada colina mágica.
Publicado en http://www.juventudtecnicat.co.cu/contenido/excavaciones-atapuerca-europeo-mas-antiguo-0